Creado como poblado en 1701 por Juan de Vargas y Sotomayor; y mediante decreto de 07 de marzo de 1810 la real audiencia de santa fe creo la municipalidad.
Paicol con una superficie de 298 km2, hace parte de la región suroccidental del departamento del Huila, entre la margen derecha del Río Páez e izquierda del Río de la Magdalena. Se encuentra a 866 MSNM y posee una temperatura promedio de 27 grados centígrados. Con una población de 5500 habitantes, de la cual el 69% esta ubicada en el sector rural y 31% en el sector urbano.
Al norte limita con el municipio de Tesalia, Nátaga y el departamento del Cauca, al sur con los municipios del Agrado y el Pital, al oriente con el municipio de El Gigante y al occidente con el municipio de La Plata. Su cabecera municipal se encuentra a una distancia aproximada de 100 Km. de Neiva, capital del departamento por carretera pavimentada.
Su nombre al parecer, proviene de la gran abundancia de paico, planta medicinal encontrada en este lugar por José Celestino Mutis.
Paicol que en dialecto quechua- aymará significa “Puerta del Viento”; por estar ubicado al final del canon del Río Páez, trae brisas y vientos de Tierradentro y del Nevado del Huila, que se encajonan a través de la actual carrera 5, anteriormente “Camino Real de Guanacas” embargando de una apacible frescura el poblado.
También Paicol es conocido como “La Villa de las Maravillas Naturales” por su gran riqueza natural.
El Paicoleño es de arraigadas costumbres, sencillo, honesto, trabajador, hospitalario, respetuoso, paciente, critico y observador.
El fervor del pueblo Paicoleño, le da identidad a la región de gran sensibilidad por su espiritualidad y servicio a Dios.
La fiesta patronal en el mes de agosto rinde honor a Santa Rosa de Lima, donde se deja ver la fe y generosidad de sus gentes, acompañada de juegos pirotécnicos que encierran magia y colorido.
En el mes de Septiembre, los días 13 y 14 se conmemora un año más de la llegada del Señor de Los Milagros, rindiendo culto al todo poderoso con procesión y lucernarios que adornan las calles.